Lo + leído

21 agosto 2009


Capítulo 19: El Tiranosaurus Rex

Zanky se levantó a la mañana siguiente y bajó solo al Gran Comedor. Si ya de por sí la gente lo miraba raro, cuando llegaron los loros con El Profeta matutino todos comenzaron a reirse de él. Zanky desplegó su periódico y leyó el artículo de Danta Skeeter.

----- Cotilleos de Danta: Zanky, el Brad Pitt de Hogwarts -----

Y es que no se le puede definir de otra forma, queridas lectoras. El niño que sobrevivió tiene un nuevo apodo en Hogwarts: "El ai omá que rico", así nos lo cuenta su amiga del alma Jana Jabón:
"Dende que lo conoco siempre m'ha atraio como lo pintalabio rosa" nos confiesa esta chica que parece que tenga un melón en la boca mientras habla.
Yo misma, queridas lectoras, me vi seducida por las grandes dotes románticas de nuestro querido Zanky Potter. Su profunda voz, sus musculazos, su sonrisa pervertidora. Me vi sorprendida cuando me guiñó un ojo y se lamió el labio superior despacio.
Zanky Potter, el niño no tan niño, ya ha aprendido todo acerca del ligoteo en Hogwarts, Jana Jabón nos explica cómo:
"Todo comensó cuando fue a la ecuela de idioma de ca la Mirte la Cotilla, que tiene asín como un sotanillo donde ante había un montruo dando clase de mursiano. Sanky aprendió ahí a hablá como lo mursiano y dende entonse, como que é má irresitible, no sé si me eplico..."
Traduciendo a esta alumna: Zanky, además de un físico admirable, también habla varias lenguas. Un cerebro forrado de un cuerpo escultural, todo lo que una madre de una alumna de Hogwarts desea para su niñita querida.
Después de conocer a Zanky, queridas lectoras, no dudo en afirmar que está más que preparado para afrontar esta dura prueba que es el Torneo de los Tres Pringaos. Seguiremos informando.
Danta Skeeter"


Zanky no salía de su asombro, pero parecía que era el único que no se reía. El resto de alumnos, sobre todo los Ravenclaws, estaban haciendo comentarios chistosos y de mal gusto sobre él.

- Vaya Zanky, ¿dónde has guardado los musculazos?

- Donde tú la inteligencia.

- ¿Con cuantas chicas te has enrollado? ¿eh, pillín?

- Con dos: con tu madre y tu abuela.

- ¿Cuánto nos cobrarías por un streaptess, guapo? jijiji.

- MI ZANKY NO COBRA POR UN STREAPTESS, ¡¡¡HOMBRE YA!!! Quiero decir... que no es que los haga gratis, ES QUE NO LOS HACE Y SAN SEACABÓ.

Tita entró en el Gran Comedor y comenzó a romper en mil pedazos y a mordiscos todos los ejemplares que llegaban de El Profeta.

- Oi como pille a la Danta... le voy a poner la miopía solo en un ojo de la guantá que le voy a pegar.

- Zanky, ¿quieres...?

- NO, ¡no quiero morrearme contigo! ¡Dejadme en paz! - al girarse Zanky descubrió a Luna mirándolo algo asustada por su reacción, Tita también había reaccionado violentamente y tuvo que frenar en seco su puño, que iba directo a la cara de Luna.

- Oi, perdona Luna, ¿decías?

- Que si quieres una magdalena, quedan pocas y como sé que a ti te gustan más que a mí los lacasitos...

- Sí, sí, muchas gracias Luna.

- Tita, gracias por dejar KO a la mosca que me seguía.

Y Luna se fue de allí dando saltitos y cantando como un pajarillo.

- Algún día vamos a tener un accidente por culpa de la libertad de prensa... voy a hablar con Dumbledore a ver si me deja censurar los Profetas que entren en Hogwarts, eso sí, que los tipex los pague la escuela, que no puedo estirar tanto el sueldo, ¡no sabes el pastón que me estoy gastando en verduras! los caballos pijos de las galas pijas se comen mis cosas verdes, así no hay quien haga dieta. Cualquier día hago matanza con ellos y a la porra la dieta.

Tita fue a salir del Gran Comedor cuando se cruzó con Dumbledore, cojeando y con un ojo hinchado y morado.

- ¿Pero qué le ha pasado?

- Nada, hijos míos, nada, el canguro de Cascao, que me tiene manía...

- ¿Rambi? No puede ser, con lo mimoso que es. ¿Seguro que no se ha caído usted de la cama?

Zanky salió de allí sin apenas desayunar.

Los siguientes días fueron más de lo mismo. Risas, chapitas y humillaciones. Aunque la mafia solía ayudarlo en situaciones críticas, pero sólo el sector Hufflepuff, como la Susan le mencionó.

Ni siquiera el castigo con Lucius junto a Ron había servido de mucho. Ron estaba convencido de que Zanky ahora era cachas, Zanky lo notó cuando se fijó en que lo miraba de arriba abajo mientras abanicaba a Lucius en su despacho.

Llegó el día de la visita a Hogsmeade. Zanky no quería ir pero Jermayoni lo convenció y fueron juntos de camino al pueblo, él con la sábana invisible por encima y ella acompañada por Jana.

- Pues creo que me voy a pedir una cerveza de mantequilla sin mantequilla, que a mí me engorda mucho.

- Po yo ni eso, agüita, que fuera de Jogua to engorda, ya ve tú, me comí una aseituna la otra vé y mira como etoy ahora, que no sé cuándo va a reventar la - "crrrrsssch" - farda... vaya, otro descosío. Jamía, a vé si no pasamo po la butí de la Carmele y me compro argo de mi talla... la 34.

- Yo no pienso ir a la Boutic, a mí me dejáis en la tienda de chuches y me pasáis a recoger luego.

Jana se detuvo en seco, asustada, y apretó el brazo de Jermayoni.

- Jerma tía, o sea, m'ha vuerto a pasá, tengo la quimioterapia esa con Sanky, que lo etoy oyendo en mi mente xiquilla, que dise que quiere una golosina.

En ese momento pasaron corriendo en dirección a Hogsmeade la mormona y la Narcy, ambas cronómetro en mano.

- Yo llevou 120 pulsaciounes por segundou.

- Yo más, porque la Narcy nació pulsada, porque la Narcy controla su corazón como le da la gana y porque la Narcy va a ganar esta apuesta, el corazón de la Narcy bombea más sangre que el tuyo.

- Esou ya lou veremous.

Y las dos desaparecieron por una de las primeras calles del pueblo.

Zanky, Jana y Jermayoni siguieron caminando, ya estaban casi en la primera casa cuando un rebaño de vacas los rodearon.

- ¡¡JERMA!! AI JERMA QUE NO QUIEREN COMÉEE.

- Jana tía, que las vacas comen plantas.

- Que no, que no, míralas, qué cara d'ansiosa tienen, eso é que ya nos han olío, ¿po qué me habré pueto perfume de melocotón hoy? ahora se pensarán que soy un melocotón enorme, y ademá mi xixa etá mu buena, ¡no van a dejá ni restos de mí! SOCORROCOOOOO, SOCORROCOOOOOO, ¡¡¡que una se m'ha cagao ensima!!!

- Yejeeeeee, chuuuusa, circulando, che che che, rrrggggg rgggggg ¡¡¡¡yejeeee!!!! - Enrique Alfarero apareció entre las vacas haciendo un pasillo por el que podían salir - Ai potrilla, deja que te ayude a salir de aquí, que a mi lado se está más calentico, jamona.

Jermayoni se apartó de Enrique, pero estaba rodeada de vacas, no tenía escapatoria salvo...

- Hazme sitio ahí debajo Zanky, por lo que más quieras.

- ¡Aibá! ¿Ha vito eso Quique? ¡¡¡¡Que esa vaca s'ha comío a la Jerma!!!! AI LA JERMAAAAA. JERMAAAA, ¿¿¿m'hoyes??? tú tranquila que entregaré la lexe de qué eta vaca a tu padre pa que pueda enterrarte. ¡¡¡¡AI QUE PENITA MÁ GRANDE QUE A LA JERMA SE LA COMÍO UNA VACAAAAAA!!!!

- Que no muchaaaacha, que esto va a ser que se ha derretío con mi sesapil.

Jermayoni y Zanky salieron corriendo y se metieron en Las Tres Escobas. Allí Laurerta estaba sirviendo a todos los alumnos que acudían al local. Jermayoni salió de bajo la sábana.

- Mira, Ron está ahí solo, amargado, como lo que es. Pero... ¿está hablando con alguien? Voy a acercarme a cotillear, ven.

Jermayoni se acercó a Ron por detrás y lo cogió del pelo.

- Ui, perdona, ¿te he tirado?

- Un poco.

- ¿Con quién hablas? ¿Por qué tienes dos cervezas de mantequilla?

- Una es de Gervasio.

- ¿Gervasio?

- Si, es mi amigo, pero creo que no le gusta la cerveza de mantequilla, no ha dado ni un sorbo. Mira, Gervasio, esta es Jermayoni. Jerma, este es Gervasio, lo conocí ayer mientras paseaba solo por las orillas del lago.

Zanky y Jermayoni miraron el asiento que señalaba Ron, pero estaba vacío, y con el vaso lleno.

- Emmm... esto... encantada... Ger... Gervasio... Pues nada Ron, aquí te dejo, que yo voy a ver si encuentro alguien de carne y hueso. Chaíto.

Zanky aprovechó la ocasión y dio un cachete a Ron en la cabeza.

- ¡Oye! ¿Qué te he hecho ahora, Gervasio?

- Definitivamente - murmuró Zanky a Jermayoni mientras se dirigían a una mesa libre - hemos hecho bien al librarnos de él, ¿quién sabe lo que nos hubiera podido contagiar?

Jermayoni pidió dos cervezas de mantequilla a Laurerta y ésta la miró de forma extraña.

- Cielo, es la segunda ves hoy que alguien me pide dos servesas... ¿seguro que no ha llegado la gripe A a Hogwarts?

- Tranquila, es que... una es para llevar.

- Entiendo... ¿la meto en un vasito de plástico?

- No, gracias - respondió Zanky, sin querer.

Laurerta se apartó de Jermayoni sin quitarle la vista de encima, asustada por su repentino cambio de voz, y regresó con dos vasos de cervezas de mantequilla, pero no se acercó mucho.

Zanky se fijó en que Tita Hagrid estaba un par de mesas más allá, junto a OjoChungo y algunos profesores más. Vio como Tita olfateaba el aire hasta que su mirada ceñuda se clavó en Jermayoni. Se levantó de golpe y fue directa hacia ella.

- ¿Qué le has hecho a Zanky? Lo huelo, pero aquí no está, ¡¡DIME QUÉ HAS HECHO!!

Jermayoni apenas podía hablar, Tita la había levantado de la silla y le apretaba el cuello con una mano.

- Tita, estoy aquí, mira abajo. - Zanky asomó una mano para que Tita lo viera.

- ¡¡¡HAS DESCUARTIZADO A ZANKY!!! Yo te mato, yo te mato y te hago picadillo con mi plato. Yo te mato, te hago picadillo con el plato y alimento contigo a los pollos. Yo te mato, te hago picadillo con mi plato, alimento contigo a los pollos y después me los como yo a ellos. ¡¡¡PERO YO TE MATOOOOOOOOOOO!!!

- ¡Que no Tita! - Zanky se vio obligado a quitarse la sábana, Jermayoni estaba muy morada - que estaba escondido...

Tita soltó a Jermayoni y miró a su alrededor.

- Jijiji, qué confusión más tonta... No, Laurerta, tranquila, no hace falta que saques el mocho -dijo al ver a la camarera con el cubo y la fregona - hoy no voy a volver a derramar sangre...

OjoChungo se acercó a la mesa de Jermayoni y Zanky, para tranquilizar a Tita.

- Ya está, ya pasó, Zanky está a salvo.

- Si, si, no sé... que me ha entrado la paranoya... - Tita volvió a mirar a Laurerta, que seguía quieta mirándola con el mocho en la mano y con los guantes puestos - Que no Laurerta, que guardes el mocho, que no pasa nada.

- ¿Y por qué te escondes Zanky?

- Porque la gente se mete conmigo, pero bueno, eso es lo menos, es que me da repelús que algunas chicas me toquen para ver si de verdad tengo músculo, y no quiero que nadie más me pida que le guiñe un ojo ni que me chupe el labio.

- Oiiii, oi, esto lo arreglo yo ahora mismo... Que no Laurerta, guarda el mocho te he dicho... - Tita se puso en pie - A VER TO EL MUNDO, EL BARRA LA PROXIMO BARRA PROXIMA QUE MOLESTE A MI ZANKY CON ESAS TONTERIAS DE QUE ES CACHAS O ESTA MUY BUENORRO, ADEMÁS PARTICIPARÁ EN EL SORTEO ÚNICO DE UN CORTE DE PELO GRATUITO, PATROCINADO POR MI PLATO. He dicho... Laurerta, que guardes el mocho leñe, que aquí no va a pasar nada.

Algunas chicas se fueron del local, asustadas, y el resto disimuló como pudo. Tita se había sentado ya junto a OjoChungo en la mesa de Jermayoni y Zanky.

-¿Por qué no os sentais con Ron? Miradle, ¿no os da lastimica?

- Psss, ya se ha buscado novio.

- ¿De verdad? - se asombró Tita - Oiii, cuando se lo diga a Molly, con lo ilusionada que estaba con que Ron se echara novio.

- Lo único que es invisible...

- Am, eso no le hará tanta gracia... ¿pero es chico no? ¿y se han dado un besito ya?

- Tita, me está sentando mal la cerveza... - protestó Zanky.

- A saber qué te ha metido Jermayoni en la bebida... ¡Oh! por cierto, que no se entere nadie... bueno, mejor que te lo diga OjoChungo, que yo no sé poner voz baja y se va a enterar to Dios.

- Tita dice - comenzó OjoChungo - que vayas esta noche bajo la sábana invisible a su cabaña, que tiene algo que enseñarte.

- Dile lo otro también, OjoChungo.

- También que no cenes mucho, que tiene mucha carne acumulada en casa y tiene que darle salida.

- ¿Puedo ir yo también? - preguntó Jermayoni.

- No - respondió Tita.

- ¿Por qué?

- Porque no.

- ¡Pero yo quiero!

- ¡¡¡QUE NOOOOOO!!! Y Laurerta, por Merlín, guarda ya el dichoso mocho.

Pasaron el rato, hasta que alguien abrió la puerta del local de golpe. Era Charlie, le sangraba un largo arañazo sobre la mejilla izquierda y tenía parte de la camisa y los pantalones desgarrados. Sus ojos localizaron a Tita y fue cojeando hacia ella.

- Tita, necesitamos tu ayuda... se está desvocando otra vez, corre antes de que se suelte, creo que esa fina cinta de lacito lila no durará mucho.

- Desde luego Charlie, ten ayudantes para esto, ¡qué le habreis hecho a la pobre criaturita! anda, vamos para allá, y por Merlín, Charlie, estamos en invierno, aprende a ponerte ropa más gruesa, que no eres galo.

- Es mi uniforme, el profesor Dumbledore...

- Este Dumbledore... Bueno, adiós a todos, Laurerta, ya me voy, baja el mocho de una vez, hija mía, para una vez que dejo a un hombre en silla de ruedas y con transfusión de seis litros de sangre... hay que ver.

Zanky y Jermayoni salieron al cabo de poco. Zanky se volvió a poner la sábana invisible. Se encontraron con Jana y Enrique buscando entre las vacas de antes.

- ¡La encontré! Quique, que etá aquí, ¡y entera! ¡AI QUE ALEGRIA MÁ GRANDEEEE! Que pensábamo que te había comío la vaca esa de la cara poxa. Ojú que suto no hemo llevao.

- ¿Por donde lo habíamos dejado, mocica? - Enrique alargó su brazo derecho y lo apoyó en los hombros de Jermayoni. Ella se fue agachando poco a poco hasta que pudo escapar y salir corriendo hacia el castillo, seguida por Jana y Zanky bajo la sábana.

- Eso, eso, ¡enfríate! si es que soy irresistible pa las mozas de ciudad... a ver donde encuentras un mozo como yo, tan lleno de pelo y sudor, en una ciudad. En ningún sitio, ¡qué sabio fue mi abuelo al dejarlo todo pa irse pal campo!

Zanky se preparó cuando ya era casi de noche. No había cenado: conocía a Tita. Salió de la sala común de Hufflepuff con su sábana invisible puesta y consiguió llegar a casa de Tita.

Ding dong diiiiing

- ¿Zanky? Pasa.

Zanky entró y se quitó la sábana. La casa estaba repleta de pollos asados, ternascos enteros a la parrilla, morcillones, longanizas, panceta, huevos fritos, pavos rellenos, cochinillos, costillas de cerdo, muslitos de pollo...

- Ea, empieza por donde quieras.

Zanky zampó cuanto pudo y pidió a Tita que le mandara el resto a su habitación, tenía sitio para todo debajo de la cama. Después, Tita pidió a Zanky que se pusiera la sábana y esperara su señal. Apagó la luz.

- No hagas ruido, tenemos que esperar a que el cuchitril ese de oro de las galas pijas apague las luces. Sé que la Maxime de las narices me vigila, siempre apaga las luces cuando yo apago las mías. ¡Vualá! ya las han apagado, vamos, no hagas ruido.

Salieron de la cabaña, Tita iba a rastras por el suelo para evitar ser vista, y Zanky la seguía despacio. Fifí se había quedado en la cabaña, comiendo de las sobras de Zanky.

Llegaron a la puerta del barco de Durmstrang y Tita llamó.

Toc toc.

- ¿Tita?

- Si, soy yo, ¿estás listo?

- Espera, acabo de salir de la ducha.

- No, importa, sal así... - y susurró: - Zanky, tápate los ojos.

Pero Cascaso salió con pantalones, aunque sin camiseta, como siempre. Tita lo cogió de un brazo y apoyó la cabeza en su hombro.

- ¿Vamos?

Zanky siguió a Tita y Cascao hacia el bosque. Tita iba metiendo mano cada vez más descaradamente a Webo, pero Zanky prefería mirar hacia otro lado. Llegaron a una especie de explanada donde había tres extraños lagartos pequeñitos.

- ¿A qué son una pocholada?

- ¿Puedo acercarme? - preguntó Webo.

- Claro, yo me quedo aquí... mirándote...

Cuando Webo se hubo alejado Zanky asomó la cabeza.

- ¡Aibá Zanky! Qué susto me has dado - Tita guardó el plato - ¿Qué haces aquí?

- Me habías dicho que viniera...

- ¡Ah si! perdona, es que a mí el aire del bosque como que me hipnotiza...

- Sí, si... bueno... ¿qué son esos lagartos?

- Dinosaurios.

- No parecen muy peligrosos.

- Y no lo son - dijo Tita, mirándolos con ternura - ese se llama Fofito, ese otro Miliqui, y ese Picurrín.

- ¿Y qué hacen aquí?

- ¡¡Ah!! van a formar parte de la primera prueba del Torneo, os tendréis que enfrentar a ellos, cada uno tiene una bellota dorada, ellos lo protegerán, vosotros deberéis quitárselo.

- Será fácil.

- Si, ayer mismo una paloma quitó el huevo a Miliqui... pero...

Se oyeron unos enormes pasos que hicieron temblar todo.

- Eso... - dijo Zanky - ¿Eso no era un árbol?

- Nooo, esa es la patita de Pimpi, debo reconocer que es un poco traviesilla...

La enorme pata se quedó quieta un segundo y Zanky levantó la cabeza. Pimpi era un enorme dinosaurio, un tiranosaurus rex de tomo y lomo, su cabeza sobresalía por encima de los árboles, pero llevaba una especie de gorro hecho con hojas.

- ¿Qué lleva en la cabeza?

- ¿Te gusta? Se lo hice yo. Es para camuflarla, como es más alta que los árboles corríamos el riesgo de que se viera desde el castillo, así que le hice ese casco de camuflaje, así nadie la podrá ver desde Hogwarts.

- ¡Pero es muy peligroso!

- Es una incomprendida... sólo tienes que ver cómo ha dejado a Charlie esta mañana por no darle su elefante.

- ¿Qué es? ¿Su muñeco?

- No, el elefante era su almuerzo.

Zanky comenzaba a temer a aquel dinosaurio, sobre todo desde el momento en que Tita había dicho que era "traviesilla", puesto que ella jamás decía nada malo de ninguna criatura.

- ¿Por qué no son todos los dinosaurios iguales?

- Por falta de presupuesto... los del ministerio que son unos ratas...

Zanky se puso de nuevo la sábana invisible, Webo volvía.

- ¡Es increíble!

- ¡A que sí! Pues no has visto nada, mira, voy a ponerle este enorme lacito lila, a ver si se deja.

Tita se acercó a Pimpi. Al principio la enorme dinosauria intentó comérsela, pero Tita consiguió subirse a su cuello y comenzó a atarle el lacito. La dinosauria se resistía, aquello parecía un ruedo de toros, Tita montada sobre la dinosauria y la dinosauria dando botes y moviéndose por todas partes.

- ¡¡No saltes!! ¡¡¡que te van a ver, Pimpi!!!

Finalmente Pimpi hizo un movimiento brusco y tiró a Tita al suelo. Pimpi destrozó el lacito entre sus mandívulas.

- Hay que ver que traviesilla es, igual que mi Fifí, no le gusta el lila. Mañana probaré con un lila menos chillón...

Zanky se fue corriendo de allí bajo la sábana invisible. La simple idea de enfrentarse a aquella criatura le producía escalofríos, ojalá le tocara algunos de los lagartos enanos en su primera prueba. Dejó a Tita con Webo dándose mimitos y salió corriendo del bosque. Pero se topó con Madame Maxime, que iba pintándose los labios, aún con los rulos puestos, en dirección al bosque.

- Magdita sea, esta bguta me la ha vuelto a colag.

Zanky recordó de pronto que aquella noche tenía una cita con Sirius, debía encontrarse con él en la sala común a las 12 de la noche. Corrió cuanto pudo y entró a la sala común de Hufflepuff casi sin aire. Allí no había nadie.

- Ai que pena más grandeeee, sniiiif, ya pensaba que te habías olvidado de tu tiíto Siriito, sniiiif, ven, dame un abracito, que tengo mucha penita, sniiiif.

Zanky se giró sobresaltado hacia la chimenea, allí estaba Sirius, o más bien su cara dibujada en las llamas.

- No, que me quemo.

- Sniiiif, ¿no quieres darle un abracito a tu tiíto? sniiiif.

- Así no.

- Eres igual que tu madre. Bueno, ¿cómo estás, cielito? sniiif, yo estoy de camino a Hogwarts, ahora mismo estoy en una perrera municipal, mañana me van a sacrificar, pero ya me las apañaré, sniiiif, no te preocupes por mí.

Sirius guardó silencio, pero Zanky no dijo nada.

- ¿No te preocupa que mañana pueda morir?

- Me has dicho que no me preocupe...

- Sniiif, ¡¡¡qué pena más grande!!! sniiiif, ¡quieren ponerme la inyección letal!

- Che, che che, aquí el que tiene un problema soy yo, que mi nombre ha aparecido en el bombo de fuego y ahora no sé qué hacer.

- Es verdad, es verdad, sniiif, solo estoy preocupado por mi integridad física, ¿por qué seré tan egoista? sniiiif. Pues mi Zanky, está claro que alguien embrujó el bombo. No creo que fuera Tita, ella sería incapaz de embrujar una mosca, ella es más de ir a lo bestia, sniiif, si hubiera sido ella ten por seguro que el bombo sólo tendría papeletas con tu nombre y estaría abollado.

- No pienso que haya sido Tita...

- ¡Ah! ¿La sigues queriendo más que a mí? Ai que penita más grandeeee, yo que salí de Azkaban sólo para verte, yo que lo pasé muy muy mal, yo que ando perdido por el mundo para protegerte, yo que que te ayudo cuando tienes problemas...

Zanky no dijo nada.

- Idéntico a tu madre... pues que sepas que en Hogwarts hay un antiguo mortífago que quedó en libertad por chivato... ten mucho cuidado con el canguro de Webo...

- ¿Rambo fue mortífago?

- Oh sí, de los peores, sniiif.

- La primera prueba serán lagartos y dinosaurios.

- Con los lagartos no habrá problema, suelen morirse cuando los chafas, sniiiif, ¡están riquísimos! y en cuanto al dinosaurio... va a estar un poco más chungo...

- ¿Un poco?

- Sniiiif, era por calmar las cosas. Algo crucial... ¿Ese dinosaurio lo está cuidando Tita?

- Sí.

- Entonces será fácil, escúchame atentamente, lo más atentamente que hayas escuchado jamás a nadie. Lo que voy a decirte será esencial si quieres derrotar a ese dinosaurio, más aún, a cualquier bestia que haya cuidado Tita. Atención porque no lo voy a repetir dos veces, afina el oído, es extremadamente importante que memorices lo que voy a decirte...

Un ruido se oyó por las escaleras de la sala común.

- Ai, ayayayayay, que viene alguien, ¡que viene alguien! sniiiiif, apáñatelas como puedas, dame dos besitos.... ai, no, no, sniiiif, no hay tiempo. Adiós Zanky, un consejo: mantente cerca de tus amigos. Adiós, sniiiif.

La imagen de Sirius se desvaneció y Zanky se dio la vuelta. Ron acababa de bajar las escaleras, con cara de sueño y abrazado a su osito de Hello Kitty.

- ¿Gervasio? ¿Estás aquí, Gervasio?

Zanky estalló.

- Eres... eres... iiiiiish. "Mantente con tus amigos, mantente con tus amigos" Y se va sin decirme lo importante el tío, y todo por tu culpa. Es que te cogía del pelo y.... y.... iiiiish ¡¡¡por qué no seré más galo!!!

Zanky buscó algo cerca para tirarle a Ron, pero no encontró nada.

- Vete!, ¡¡vete que me tienes hasta el moño ya!!

- ¿Gervasio?

- ¡¡¡QUE TE VAYAAAAAAAS!!!

- OYEEEEES QUE AQUÍ QUEREMO DORMÍ, A VÉ SI SUS CALLAIIIIII, COÑEEEEE.

- COMO BAJE LA SUSAN....

- Aiba, ¡¡¡que viene la Susan!!! corre Ron ¡¡¡¡corre!!!!

- ¡¡Gervasio!! ¡¡Corre!!

- Copyright © Zanky Potter - Date A Live - Soporte por Blogger - Diseño por Johanes Djogan - Modificado por Zancaturno -