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02 febrero 2009


Capítulo 5: Artillerías Weasley

Zanky abrió los ojos de nuevo cuando estaban en La Tejonera. Nada más abrirlos recordó su estancia allí el verano pasado. Todo estaba exactamente igual. Zanky recorrió con la vista la sala, estaban en la cocina de los Weasley y Charlie estaba tirando fuerte de Ron para desatascarle la cabeza de la silla, al parecer, Ron había salido directo en dirección al respaldo de una de las numerosas sillas y se había quedado atrapado.

- Bueno, ya estamos aquí... ¿y Molly?

- ¡ARTHUR WEASLEY! - Molly salió de detrás de la MagiMix con cara de enfado - Te he dicho que no fueras a recoger a Zanky con esa ropa. ¡Ve ahora mismo a cambiarte! ¡Hombre ya!

Zanky no se había fijado hasta entonces, pero era cierto que el señor Weasley iba vestido de forma extraña. Llevaba un traje de camuflaje, como si pretendiera ir de expedición para ver leones.

- Si, querida - Arthur bajó la cabeza y fue hacia el piso de arriba.

- ¡Zanky! Cuánto tiempo sin verte, mua, mua, ¿Qué tal el verano? ¡Ui que paliducho! esta noche vamos a hacer un banquete, tenemos muchos invitados, ha venido Luna a pasar unos días, su padre, Salemo Lovegood, está en el Tibet plantando cara a los magos chinos por no se qué... y nos ha dejado a su hija para que la llevemos a los Mundiales de Quidditch. También ha venido Jermayoni - Molly adoptó una cara de asco - está en su habitación... "acomodándola", más le vale que cuando se largue quite el gotelé... y además, ¡ha venido Bill! ¡BIIIIIILL MUEVE EL CULO HASTA AQUÍ Y DEJA YA EL CHIVATO!

- ¿Chivato?

- Si, es como... como lo llaman los muggles...

- TELETONO PORTATIL

- Gracias cariño, eso, teletono portatil, sirve para hablar con gente que está muy lejos, así, en directo... BIIIIIILL ¿¿BAJAS O QUÉ???

Zanky vio a Bill bajar por las escaleras. Era un hombre alto, con el pelo pelirrojo corto y engominado, bien afeitado y con traje y corbata, llevaba en la mano derecha una especie de esfera pequeña y en su interior había una llama que adoptaba la cara de la persona con quien estaba hablando Bill.

- Bill trabaja en Gringotts, se encarga de comprar o vender acciones internaciones, y en esta crisis... pierde la paciencia muy fácilmente... está estresado el pobre.

- Mira, te lo voy a decir muy claramente, o vendes, o te mando una lechuza bomba, tú veras... no, vamos a ver, no... que he dicho... QUE VENDAS YA OST...

- BIIIIIIILL un taco más y te juro que te arranco ese chivato y lo pisoteo de tal forma que no se pueda reparar ni mediante magia. ¡VEN Y PRESÉNTATE!

- Espera mami que acabe con...

- QUE NO ESPERO, APAGA EL CHIVATO DE UNA MALDITA VEZ Y VEN A SALUDAR A ZANKY.

Bill dijo algo en voz baja.

- ¿Cómo has dicho? Oi Bill... te la estás jugando... dame el chivato.

- No, que lo necesito. 

- Que me des el chivato.

- Es que...

- DAME EL CHIVATO ¡YA!

Bill entregó a su madre el chivato y ella lo colocó encima del tercer estante de la cocina, el estante más alto al que ella llegaba.

- Ea, así no lo podrás recuperar... ¡hombre ya! y ahora saluda a Zanky como es debido.

- Hola Zanky, encantado de conocerlo, tenga mi carjeta, mi nombre es Bill Weasley, asesor del Ministerio de Magia en Asuntos Económicos Internacionales. 

Zanky fue a coger la tarjeta que le ofrecía Bill pero en ese momento Molly dio un guantazo en la mano de su hijo.

- Zanky es un invitado, no un cliente, así que haz el favor y dale dos besitos, ¡hombre ya!

Bill dio dos besos, ruborizado, a Zanky, y después fue a ayudar a Charlie con la cabeza de Ron.

Cuando por fin Ron era libre, acompañó a Zanky al piso de arriba, y allí encontraron a Luna y Jermayoni en una habitación. Luna estaba pintando una florecita en un pergamino, mientras Jermayoni, con un tono un poco más rubio que el curso anterior, intentaba colocar las cortinas rojas de su nueva habitación.

- Luna, pásame el hilo dorado... Lu... ¡LUNA! el hilo... Luna... Ains... esta niña, ¡¡qué paciencia!! Ui, ¡ZANKY! ¿Qué tal? - Jermayoni se acercó y le plantó dos besos a Zanky, luego sacó su pintalabios y volvió a retocarse - O sea, veo que habéis llegado. Yo llevo dos días redecorando el cuarto de Ron, ¿a que queda cuco? me encantan las paredes rosas, o sea, le hacía falta un toque femenino. 

Zanky se fijó en las paredes, rosas clarito con cuadros de muñecas. Una estantería repleta de muñecas de porcelada, un edredón rojo con corazoncitos y un oso enorme de peluche, rosa. Además, un amario enorme y un tocador, donde Luna estaba dibujando. A Zanky le dio una arcada.

- ¿Te encuentras bien, Zanky? O sea, eso van a ser los polvos flú, marean mucho... Luna... emmm... nada, tú sigue dibujando... Por cierto chicos, algo ultramega importante. Le he dicho a Jana que estoy en Las Vegas, no quiero que sepa que estoy aquí, porque sinó hubiera venido también y no me apetece verla tan pronto. Así que si os pregunta, ya sabéis, he estado en Las Vegas. ¿Vale? 

- Entendido y... ¿dónde dormiremos Ron y yo? 

- En el cuarto de Fred y George. 

- ¿Y ellos? 

- Con el Coco en el desván.

- ¿Y Bill?

- En su cuarto.

- ¿Y Luna? 

- Aquí en mi alfom... digo... conmigo.

Zanky y Ron fueron hacia su nuevo cuarto, el de los gemelos, y dejaron a Jermayoni y a Luna terminar de acomodarse en el cuarto de Ron. Zanky vio que Charlie ya le había dejado el baúl en su cama, y Molly le había dejado una galleta de chocolate sobre la almohada. Zanky se acostó y notó algo duro bajo las sábanas. Era un objeto redondo, parecido a un ojo, y que comenzó a hacer un ruido extraño, como un reloj.

- ¿Qué es est...?

- ¡TÍRALO POR LA VENTANA! - Fred entró rápido, agarró el objeto y lo lanzó lo más fuerte que pudo, pero la ventana estaba cerrada y rebotó dentro de nuevo.

- ¡ATRAPADLO!

Fue Zanky el que lo cazó al vuelo y, después de abrir la ventana, lo lanzó hacia fuera con todas sus fuerzas, asustado.

- ¡¡AL SUELO!! 

Una fuerte explosión se oyó en el exterior, y rompió los cristales de toda la casa. La explosión había creado una burbuja de polvo que comenzó a entrar a La Tejonera.

- Oh oh - George estaba de pie, junto a la puerta, mirando a su hermano gemelo.

- Nos la hemos cargado.

- MIS CORTINAAAAAS.

- OS MATOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO.

El ruido de unos pisotones que se acercaban puso pálidos a los gemelos, pero fueron incapaces de moverse, en el fondo sabían que su madre les encontraría antes del anochecer y no se podrían librar de su enfado fácilmente.

- YO OS MATOOOOOOOOO.

Zanky vio aparecer a la señora Weasley, roja de furia, se llevó a los gemelos al piso de abajo y Zanky oyó como se ensañaba con ellos dándoles azotes a culo visto, posiblemente con una sartén, para no hacerse ella daño en la mano. Zanky oía a los gemelos suplicar a su madre para que parara, pero no les hacía caso.

- Ron... ¿qué era eso?

- ¿Eso? pues... George trabaja para el sector armado de la mafia, es decir, para las presas grandes y la extorsión en Hogwarts. También se encarga de defender a la mafia de la otra mafia, la del monstruo de las galletas - al oir ese nombre Zanky se puso serio, ese Monstruo era su archienemigo desde el curso pasado - así que manipula a Fred, que es superdotado, para que diseñe armas para la mafia... y eso era una, aunque fue peor la de hace dos días, una arma-araña. Mi madre quedó atrapada al acercarse a ella, tardamos dos horas en despegarla de la pared, y cuando por fin era libre... bueno... lo mismo que ahora pero con un herizo en vez de sartén...

- Vaaya...

- Si, de hecho, hasta están recibiendo pedidos de mafias fuera de Hogwarts, se están sacando su dinerillo... se llaman "Artillerías Weasley". Mi madre, obviamente, no sabe nada de esto, sino ahora Fred y George tendrían solo dos dedos.

- ¿En cada mano?

- No, en los dos pies... mi madre juró bajo notario delante de ellos de que si intentaban ocultarle algo grave les dejaría sin dedos. Pero cortar todos los dedos es ilegal, por eso les dejará uno en cada pie.

Al cabo de dos horas la señora Weasley les llamó para que pusieran la mesa. Jermayoni dijo que no podía ayudar, que estaba muy ocupada dándose un tratamiento capilar. Así que bajaron Ron, Zanky y Luna.

Molly aún estaba dando sartenazos a los gemelos, con una sartén en cada mano. Fred y George estaban llorando, con las nalgas amoratadas, no sabían cuánto tiempo estarían así.

- ¿Por qué no habré tenido niñas? ¡Todo cabezones! ¡Todo cabezones! ¡So bestias! si almenos uno de vosotros fuera gay... pero ni eso, ¡Ni eso! mi amiga Paqui presumiendo de que tiene un hijo gay, que si está a la moda y yo aquí, anticuada... - Molly se giró hacia Zanky - Los cubiertos están en el tercer cajón, vamos a cenar en el jardín, cielo.

Cuando Zanky salió a la terraza vio a Bill colocando con magia las mesas, y a Charlie corriendo por alrededor, con cuatro sillas colgadas de sus musculosos brazos.

- ¡Ya llevo cuatro, Bill! ¡las has escondido muy fáciles!

- ¿Qué hace Charlie?

- Me ha pedido que le esconda las sillas, que las quiere buscar... como la copa... en fin, así se entretiene y me deja en paz, que lleva dos días hablándome de copas y más copas... - se giró hacia el chivato que tenía en la mano - ¡COMPRA! esa si... ¿Cómo que no? tienes que comprar... ajam... si hombre, vende y te dejo sin posibilidad de descendencia. ¡COMPRA! ¡Hazme caso! no, no, vamos a ver, de pérdidas nada, eso va a subir, si, ¿te acuerdas de mi intuición en la compra de acciones de magdalenas? no fallé, este año han tenido ganancias. ¡Haz el favor y compra esas malditas acciones de galletas!

- Déjale Zanky - Ron se adelantó a poner los vasos - ahora, auque lo insultes, no te hará caso... solo hace caso a mi madre.

Zanky colocó los cubiertos mientras Luna iba colocando los platos, imitando a Tita cuando lanzaba el suyo, y jugando a que ella era Tita y poseía el legendario disco volador, haciendo ruidos extraños. 

En la hora de la cena estaban todos sentados alrededor de la mesa, salvo Fred y George, que comían depié, no porque estuvieran castigados, sino porque no podían sentarse en almenos una semana, almenos no como una persona...

- Pues, el caso es que la Eugenia está probando a ver si el Juan Marcos le hace caso, porque es que la Eugenia es muy enamoradiza, pero no se quiere acelerar. También es verdad que aún está muy afectada por la muerte de su último compañero, un gato pardo que murió de asco más que otra cosa, pero nada, la Eugenia que se ha convencido de que ha encontrado el amor de su vida en Juan Marcos. Pero no sé... él tiene veinticinco años y a ella casi casi se le va a pasar el arroz con los casi noventa años que tiene... en fin, y luego está Juan Marcos, que hace poco se lió con... - Molly, mientras comía, informaba a su marido de los últimos cotilleos de la comarca.

- Vende - Bill estaba hablando con el chivato escondido, en voz bajita para que su madre no se diera cuenta - vende ahora o mañana te arrepentirás. No, a ver, eso mañana ya está por lo suelos, aprovecha ahora y perderás menos, hazme caso por Merlín, ¿por qué siempre me llevas la contraria?

- Eso me gustaría saber a mí. ¡APAGA EL CHIVATO DE UNA VEZ, QUE ESTAMOS CENANDO!

- Si mami.

Zanky aprovechó que estaban Ron, Jermayoni y él separados del grupo de los adultos para ponerles al día sobre Sirius, y se tranquilizaron al saber que estaba bien.

- Charlie, ¿conoces a súper Tita? - Luna comía, pero sin manos, decía que quería probar a comer como las gallinas.

- Si Luna, de hecho, me ofrecieron un puesto en Rumanía, para cuidar dragones, siempre me han encantado los dragones, son unas criaturas peligrosas pero a la vez son tan bellas... iiiish, se me pone el vello de punta solo de pensar en ese trabajo. Pero... bueno... al final me han aceptado una solicitud para trabajar de becario en Hogwarts. Seré el ayudante de Tita en clase de Cómo Mimar a las Criaturas Mágicas. Así estaré por allí por si necesitáis algo y podré encontrar la copa... pero vamos, que no he rechazado el trabajo en Rumanía por la copa... que yo no soy adicto a la copa ¿eh? ¿eh? ¿eh? ¡Y DEJAD DE PREGUNTAR POR LA COPA!

- Esa si, si, si, si, ¡COMPRA!

Molly se levantó, fue hacia Bill sin que se diera cuenta, le quitó el chivato y dijo:

- Mira, no te conozco de nada, pero me caes mal. Así que compra de una maldita vez y vete a dormir, ¿o qué pasa? ¿que no tienes familia? ¡HOMBRE YA! PUES MI HIJO SI Y ESTAMOS CENANDO,¡¡ TE ESPERAS!! Ajam, ajam. Bien, así me gusta - Molly apagó la llama del chivato. - Ha comprado. 

- ¡TOMA! - gritó Bill emocionado, a lo que su madre reaccionó con un guantazo en la nuca.

"Plas"

- ¡Toma! y ahora, a cenar, ¡hombre ya! con el crío del chivato... espero que sea por tarjeta y no por contrato...


Después de la cena, todos se fueron a dormir, el día siguiente debían madrugar para ir pronto al Mundial de Quidditch.

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